El Instituto Cultural Cabañas u Hospicio Cabañas como mejor se le conoce, es definitivamente un sitio obligado de visita cuando se visita el Centro Histórico de Guadalajara. Solo la riqueza arquitectónica del edificio hace que valga la pena la visita al Instituto Cultural Cabañas, el cual es su nombre oficial. Sus dimensiones, la sencillez de los trazos y la armonía con las que se combinan espacios cerrados y al aire libre, le han valido ser considerado como una de las muestras más importantes de la arquitectura neoclásica en México. El complejo fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1997.
Construcción del Hospicio Cabañas
Debe su nombre a Juan Cruz Ruiz de Cabañas, quien fue obispo de la diócesis de Guadalajara y quien ordenó su construcción. Este edificio es la obra maestra del arquitecto mexicano Manuel Tolsá y se construyó entre 1805 y 1845, originalmente un orfanato llamado “Casa de la misericordia”, el edificio tambien ha servido como hospital.
La Obra de Orozco en el Cabañas
A finales de 1937 por invitación de el Gobierno del Estado de Jalisco, José Clemente Orozco, el más complejo de los muralistas mexicanos, llegó al Hospicio Cabañas a pintar la antigua capilla, sin saber que se convertiría una de las piezas más importantes de arte en el país. A través de los años, Orozco pintó 53 muros, la bóveda y cúpula de la capilla.
En estos murales expresa varios momentos de la historia de México abordando la conquista, la colonia y los tiempos modernos. En los murales, Orozco interpretó la vida prehispánica, el choque cultural entre los indígenas y españoles; así mismo también abordó la fundación de Guadalajara y tocó escenas de la trágica realidad contemporánea.
Los murales no estarían completos si no fuera por el “Hombre en Llamas“, pintado en la cúpula principal del edificio a 27 metros altura, donde se aprecia una figura humana envuelta en fuego, la cual muchos consideran que, junto a las cuatro que le rodean, significa los cuatro elementos de la naturaleza; pero para otros podría representar la metáfora de la mitológica Ave Fénix.
Depués haber concluido su ciclo como asilo y luego de una intensa restauración en los años ochentas, el edificio reabrió como Instituto Cultural Cabañas y dedicado a la promoción y difusión cultural. Actualmente el gigantesco edificio cuenta con 23 patios, 106 cuartos, 72 pasillos, y dos capillas, en una superficie total de 23,447.90 m².
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El Instituto Cultural Cabañas en la Actualidad
Además de las obras de José Clemente Orozco, el Instituto Cultural Cabañas alberga otros acervos de gran valor. Entre los que destacan las obras de Mathias Goeritz y la colección del pueblo de Jalisco, conformada por pinturas y esculturas de artistas jaliscienses. Además en este lugar se realizan importantes exposiciones temporales de pintura, escultura y fotografía, que complementan la rica experiencia artística que este sitio ofrece. Para los más jóvenes, existe una sala lúdica en donde se ofrecen talleres que buscan acercar a este publico al arte de una manera divertida. Para los interesados en indagar más sobre el arte, los muros del Instituto Cultural Cabañas también albergan un biblioteca de artes y museografía. En ella, académicos, estudiantes y publico en general pueden tener acceso a ejemplares relacionados con estilos, escuelas y corrientes artísticas en sus diferentes disciplinas.
Aprovecha tu visita al Centro de Guadalajara y descubre muchas otras joyas, como la Catedral de Guadalajara, La Plaza de Armas, El Palacio de Gobierno en donde también puedes encontrar de destacados murales de José Clemente Orozco. El Teatro Degollado se encuentra también a una distancia corta y se puede caminar. Para llegar al Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara y el Templo del Expiatorio puedes caminar, conducir o tomar el transporte público.